Guaraní Antonio Franco es sin dudas el único equipo misionero que se puede dar el lujo de haber ganado a los “grandes” del fútbol argentino.
Un caso histórico fue el triunfo ante el flamante campeón Intercontinental, Independiente de Avellaneda, que estrenaba el título en el país luego de haberla conquistado en Japón, ante el Liverpool de Inglaterra. Fue el 24 de febrero de 1985 cuando el Rojo pisó el césped del estadio de Villa Sarita -para jugar por los puntos- y perdió por 1 a 0 con el conjunto franjeado, ante un estadio repleto de euforia y una desenfrenada cohetería que llegó a estremecer a los protagonistas.
Y eso que los “franjeados” también golearon a Boca Juniors, tal como ocurrió aquel 21 de abril de 1985, en la tarde que Antonio Vidal González convirtió tres goles -aunque era amistoso- en el contundente 6 a 0, y empataron 2 a 2 frente a aquel River Plate cargado de estrellas, cuando estuvo en ventaja por 2 a 0.
Se puede hablar de otras actuaciones descollantes, pero el triunfo ante Independiente ingresa en la categoría de hazaña, porque el rival llegaba portando el cartel de flamante campeón del mundo, con todos sus pergaminos y las figuras consagradas.
Y fue histórico aquel 24 de febrero de 1985, por los más de diez mil espectadores -y otros cuatro mil afuera-, por el recibimiento apoteótico que hasta dejó atónitos a los propios rivales, quedaron admirando la situación por varios minutos. Y el estadio de Villa Sarita se vistió de fiesta, porque se jugaba por los puntos y Guaraní le ganó a Independiente por 1 a 0, con tanto convertido por el correntino Julio “Palito” Arce.
Esa tarde la figura del encuentro fue Blas Eulalio Meaurio, quien tapó todo y el diario Clarín tituló: “Meaurio puso cortina al arco de Guaraní”, destacando además a Eduardo Moulia, “Pocho” Briñócoli, “Relojito” Domínguez y Darío Labaroni.
El Gráfico calificó a Nacimiento, Meaurio y Arce, como las figuras de los misioneros.
Cabe recordar que el correntino Julio Arce convirtió el único gol del encuentro antes de los 5 minutos de juego, en el arco sobre la calle Ivanowski, y antes de finalizar el primer tiempo el árbitro Abel Gnecco expulsó a José Luis Tesare, el “6” de Guaraní, quedando con un jugador menos hasta el final, que hizo más heroica la victoria.
Bochini: “No jugué, quizás por eso…”
En el verano del ‘86, Ricardo Bochini estuvo descansando en la zona de Jardín América, y allí deslizó un pícaro comentario sobre aquel histórico triunfo logrado por Guaraní en Villa Sarita, el 24 de febrero de 1985 por 1 a 0, con el recordado tanto del correntino Arce, cuando el Rojo llegaba portando el título intercontinental tras vencer en Japón al Liverpool de Inglaterra.
“Sí, me acuerdo. En Posadas no jugué…, quizás por eso… Pero en la revancha le ganamos 3 a 0 en Avellaneda, y allí con dos goles de Percudani y uno de Burruchaga, nos tomamos revancha”.
En aquel histórico partido del 1 a 0, Guaraní alistó a Meaurio; Briñócoli, Moulia, Tessare y Domínguez; Nacimiento, Labaroni y Ferreyra; Arce, Ortiz y Villarreal. Después ingresaron Rubén Noguera y Yegros. DT: “Pancho” Sa.
En Independiente jugaron Goyen; Clausen, Villaverde, Trossero y Enrique; Giusti, Marangoni y Reinoso; Merlini, Percudani y Barberón. DT. Pastoriza.
Del equipo que ganó la Intercontinental ante el Liverpool, los únicos que no estuvieron fueron Burruchaga y Bochini.
Con la expulsión de Tesare, el entrenador “franjeado” debió sacrificar a Arce y poner a Rubén Noguera.
Fuente: Julio López, en Primera Edición.
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