La mañana de este domingo fue especial para la delegación misionera que, tras una semana de intensas competencias en Mar del Plata, regresó a La Tierra Colorada con una cosecha impresionante, 78 medallas y 6 copas en equipo, además de la valiosa Copa Fair Play, que reconoce el espíritu deportivo y el respeto dentro y fuera de la competencia.
El reencuentro en el Centro Provincial de Alto Rendimiento Deportivo fue emotivo. Las sonrisas y abrazos se multiplicaron mientras los jóvenes atletas, todavía con la adrenalina del triunfo, compartían sus logros con sus familias. Para muchos, ver a sus padres entre aplausos y lágrimas fue el cierre perfecto de una experiencia inolvidable.
La Copa «Juego Limpio», un galardón especial otorgado por la organización de los Juegos Evita, premió a la delegación de Misiones por su comportamiento ejemplar. Este reconocimiento es un símbolo de los valores que los atletas misioneros encarnaron; amistad, camaradería, respeto y solidaridad, tanto dentro como fuera de las canchas.
Con una participación memorable, los atletas regresaron no solo como campeones, sino como embajadores de la provincia y el deporte. El éxito en Mar del Plata sirve de inspiración para los próximos años reafirmando el valor de la disciplina y el trabajo en equipo.
Fuente: Fernando Galarraga, El Territorio.
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