Huracán de Montecarlo fue el último equipo misionero en jugar el Federal B 2017. En la imagen, su debut ante Comunicaciones, en Mercedes (Corrientes)
Noventa y ocho equipos, 52 menos que los 160 que jugaron el torneo Federal B 2017, el último campeonato que se disputó ya que el Consejo Federal tomó la decisión de eliminarlo, son los que clasificaron a la segunda Ronda del Regional Federal Amateur, el cual se dio por finalizado la semana pasada, pero son los que tienen derecho de jugar uno «nuevo», probablemente a partir de septiembre, por 4 ascensos al Federal A.
Nunca más propicia ha quedado la oportunidad de recuperar el desaparecido certamen, ya que los clasificados entre los cuales están Atlético Posadas y Guaraní Antonio Franco por Misiones, están perfectamente distribuidos geográficamente por regiones.
El Federal B, si se analiza minuciosamente la actual situación del país por la pandemia, sería una gran solución en lo inmediato para un país que no será el mismo cuando se levante la cuarentena, máxime si se tiene en cuenta que los objetivos por los que fue creado el Regional Federal Amateur, no se alcanzaron y, lo que aún es peor, muchos de los clasificados desde los torneos de las ligas, renuncian a jugarlo.
Como ejemplo, podríamos poner aquí a varios campeones de ligas entrerrianas, algunas de las cuales hace dos temporadas que no lo juegan.
El Consejo Federal tiene en sus manos la oportunidad de reivindicarse ante la comunidad del fútbol del interior, que hasta la fecha sigue insistiendo con el error que se cometió al eliminarlo…
Las ocho regiones determinadas en su momento por el Consejo Federal, eran la Norte (para equipos de Jujuy, Salta y Tucumán); Litoral Norte (Corrientes, Chaco, Misiones y Formosa); Litoral Sur (Santa Fe y Entre Ríos); Centro (Catamarca, La Rioja, Santiago del Estero y Córdoba); Cuyo (San Juan, Mendoza y San Luis); Pampeana Norte (norte del interior de la Provincia de Buenos Aires y norte de la Provincia de La Pampa); Pampeana Sur (centro y sur de la provincia de La Pampa y el centro y el sur del interior de la provincia de Buenos Aires) y Sur (Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego).
Así se jugaba el Federal B desde 2014, entre 7 y 8 meses de duración por temporada y con planteles que en el resto del año muchas veces seguían jugando el torneo local, algo que nunca aconteció con el Federal Amateur a pesar de que en los fundamentos de su creación, a fines de 2017, el Consejo Federal expresó que la reestructuración apuntaba a «potenciar los torneos anuales de las ligas».
Quedó bien en claro, por los ejemplos que tenemos a mano en Misiones, que nada de eso sucedió y que los clubes que lo juegan con la intención de ascender, contratan 10 o 15 jugadores de otros lugares y forman planteles que nada tienen que ver con el Torneo Anual Clasificatorio liguista.
Incierto futuro
La pandemia de coronavirus ha obligado a los dirigentes deportivos a replantearse muchísimas cosas, desde la apertura de las instalaciones de las entidades hasta el modelo a utilizar para la disputa del deporte con menos adeptos, así de simple.
Pero, como en nuestro país pareciera que deportivamente todo pasa por el fútbol, a tal punto que el propio presidente Alberto Fernández, en sus discursos de la cuarentena, ha utilizado frases y terminologías de entrenadores famosos para trazar un parangón con las medidas que se fueron adoptando, es oportuno aprovechar el momento para ayudar a la resolución del problema en el que quedaremos todos, post pandemia.
Una nueva reestructuración en la cuarta categoría del fútbol argentino, ayudaría al traslado de los clubes por tramos más cortos ya que es muy posible que la libre circulación por nuestro país demorará más de lo que muchos piensan hoy.
Para proyectar el futuro inmediato, resulta importante imaginarse el escenario en el que estaremos allá por septiembre, de acuerdo a las proyecciones, cuando de a poco algunas disciplinas vayan recuperando su actividad.
Misiones, tendrá a Atlético Posadas y Guaraní Antonio Franco participando del «nuevo» Regional Federal Amateur, un torneo que no alcanzó los objetivos por los que fue creado y ha traído más problemas que soluciones, desde 2018 y lucharán por el ascenso al Federal A, categoría que este año tendría sólo actividad para determinar los ascensos a la Primera Nacional, razón por la que Crucero del Norte recién retornará a la competencia el año próximo.
Es decir que, ya se da por hecho que en 2021 el fútbol del interior que disputa los torneos del Consejo Federal, deberá adecuarse a la nueva estructura que tendrán ellos, ya que no comenzarán en el segundo semestre de este año, como debería ser.
Si algo hemos elogiado de la actual conducción del organismo de AFA, fue la regionalización que utilizó cuando reordenó el desaparecido (inexplicablemente) Federal B, el cual se jugaba agrupando los equipos por zonas geográficas con distancias cortas a recorrer y, además, tenía ascensos y descensos dentro de la región.
Además de ser una fuente de trabajo muy importante para futbolistas, técnicos y árbitros, la estructura que tenía el Federal B sería una de las soluciones que se podría utilizar para la próxima etapa de la pandemia, cuando la actividad del país se vaya recuperando por sectores y los medios de transporte de media y larga distancia no funcionen o, si lo hacen, seguramente lo harán con algunas restricciones…
Fuente: redacción Deportes Misiones.
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