Camilo Villarreal (24) aceptó el desafío y firmó para el Verdes FC, uno de los grandes de ese país. El objetivo es ganar la Premier League local y la Copa Centroamericana. “Estamos con esa ilusión”, le dijo el posadeño.
El futbolista argentino se adapta a todas las canchas. Y esto es literal. No en vano, el Observatorio de Fútbol de la CIES, con sede en Suiza, asegura que Argentina es el tercer mayor exportador de jugadores del mundo, detrás de Brasil y Francia. Se habla de 7 mil players argentinos desparramados en todo el planeta, tanto en ligas tradicionales como España o Italia, así como en otras más exóticas, como India, Egipto o Sudáfrica.
En esa última lista se puede agregar a Bélice, ese pequeño país centroamericano de 380 mil habitantes que fue una colonia británica hasta 1981 y que hoy, por primera vez, cuenta con un misionero en la Premier League, la máxima categoría local.
“Acá hay varios argentinos pero estoy seguro que no hubo nunca nadie de Misiones. Me pone contento ser el primer misionero en el fútbol de Bélice”, le dijo a El Deportivo el volante Camilo Villarreal (24), quien hace un par de semanas debutó con el Verdes FC de San Ignacio, una localidad cercana a la frontera con Guatemala.
El posadeño se inició en Guaraní Antonio Franco, tuvo pasos por Argentinos Juniors, Ferro Carril Oeste, Almagro y el Nacional Senac de Bolivia, hasta que en 2021 debutó en Polonia. Desde allí desembarcó en Bélice, en busca de nuevos desafíos.
Camilo… ¿cómo llegaste a Bélice?
Bien, yo tenía contrato en Polonia, pero me llegó esta posibilidad, la analicé y finalmente decidí romper contrato y venirme. El Verdes FC está entre los dos más grandes de Bélice, es considerado incluso el mejor equipo del país. Y yo siempre busco proyectos que me motiven. Este club te exige jugar bien y salir a ganar tanto de local como de visitante. Entonces decidí adoptar esa experiencia. Acá no hay vueltas, el objetivo ahora es salir campeón de la Premier League y clasificar a la Copa Centroamericana de la Concacaf.
¿Cómo fue el cambio? ¿Costó la adaptación?
Yo siempre trato de estar enfocado en lo que tengo que hacer, no miro mucho a los costados. Y la verdad es que acá la gente fue muy amable conmigo tras mi llegada y se brindó al máximo. Sin dudas, por ejemplo, pasé de estar a menos 5 grados en Polonia a los 30 grados de acá, pero el clima es muy parecido a Misiones. Incluso en lo que tiene que ver con la fauna, porque acá hay tucanes, yaguaretés. Y en cuanto al idioma, acá se habla en inglés, y como lo manejo, no fue difícil para mí.
¿Qué diferencias encontraste en cuanto a lo futbolístico?
Acá se juega un fútbol muy físico, son equipos muy compactos. Y los partidos se ganan por detalles. Hay mucho roce, mucha pierna fuerte. El otro día estábamos ganando y me fui con la pelota al córner para guardarla, pero vino un defensor colombiano, no le gustó mucho y me metió una patada en el tobillo que me quedó doliendo durante varios días (se ríe).
Sí, sí, incluso tengo compañeros argentinos en el equipo. Uno de ellos es Matías Verón, que viene de jugar en la Primera de India.
¿Y misioneros?
(Se ríe) Y ahí ya no es tan fácil… Estoy seguro que soy el primero. Y me pone contento ser el primero misionero en el fútbol de Bélice, es un orgullo y también un sueño cumplido.
¿Cómo fue el debut?
El debut fue en el verano, en un cuadrangular amistoso en el que salimos campeones. Y oficialmente debuté en la segunda fecha de la Premier League, que jugamos contra el Altitude y ganamos por 1-0. Jugué los 90 minutos y me fue bien, me sentí bien. Jugué de diez, aunque con la camiseta 88 (se ríe). Y el último domingo jugamos ante Wagiya FC. Ganamos 5-0 y pude meter una asistencia.
¿Cómo es la Premier League de Bélice?
¿Qué es lo primero que te dicen cuando se enteran que sos argentino?
Sin dudas, una de las primeras cosas es “Messi” o “Maradona”. Después también te hablan del asado, de las empanadas…
¿Y el mate? ¿Ya se lo invitaste a tus compañeros?
(Se ríe). Vos sabés que ellos acá conocen el mate, le dicen el “té de los argentinos”. Yo lo tomó en los viajes y por ahí algunos compañeros se animan a probar, prueban dos o tres y después lo dejan. Más o menos les gusta, pero hasta ahí.
¿Qué objetivo a corto plazo te pusiste con el Verdes?
Este es un paso más en mi carrera y vengo a dar el cien por ciento. En el fútbol no se pueden prometer resultados, pero sí trabajo, así que estoy dejando todo junto a mis compañeros por mi primer sueño, que es salir campeón de la Premier League. Y después, ir por la Copa.
¿Y a largo plazo?
Uno siempre trabaja para grandes cosas. Yo sueño con llegar a la elite, a lo más alto del fútbol. Y es en ese sentido que agradezco a Dios por esta nueva oportunidad, siempre con fe y, como te digo, dispuesto a dejar todo donde me toque jugar.
Fuente: Primera Edición.
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