El sábado pasado, el club Deportivo Unión celebró sus ochenta años de existencia. En la histórica acta de fundación figura que el 15 de agosto de 1929, en el almacén “Magallanes” de Gregorio Bladilo, se reunió un grupo de entusiastas vecinos para constituir una entidad deportiva.
Cristóbal Reinoso dirigió la asamblea y tras deliberar el nombre, los colores y sus estatutos se eligió la primera comisión directiva, conformada por su presidente, Juan Bladilo; vicepresidente, Victoriano Suárez; secretario, Manuel Dum; prosecretario, José Luis Silva; tesorero, José Ríos; protesorero, Martín Cabral; vocales titulares, Cristóbal Reinoso, Alberto Jacque, Carmelo Robaldo y Victoriano Cáceres; vocales suplentes, Carlos González, Ramón Zárate y Manuel Jacque; revisores de cuentas, Faustino Esquivel, Luis Eiguren, Ramón Rotela y Nicolás Neris. Fueron designados delegados ante la Liga de Fútbol, Deodato López y Marino Montejano.
No deben olvidarse los 63 socios fundadores como Angel Lorenzo Cáneva, Francisco Husto, Alcides Bistoletti, Teodoro Ramírez, Felipe Silva, Gumersindo González, Francisco Belloni, Jorge Romero, Fermín Bordón, Antonio López, Nicolás Toledo y José Palastanga, entre otros, quienes optan por los colores blanco y negro a rayas verticales en homenaje al primer campeón argentino chacarero.
Sería justo recordar los merecimientos de los directivos José P. Barrios (presidente), José B.González (vice), Angel Lorenzo Cáneva (secretario), Isidoro Murciego (tesorero) y Francisco Palombo, Guido Pensa, Celestino Villafañe, Carlos González y Reginaldo Canaletti, los de las vueltas olímpicas en la década del ’40.
Más adelante los esfuerzos de Jaime Baigual, José González Darré, Agapito Eiguren, Tito Echeverría, el negro Juan B.González, Muller, Villafañe, Tito Barrios, Francisco Palombo, Humberto Páiz, Francisco Piscionere, Graciolino Gudiño, Salvador Absi Esquivel, Salomón Gómez, José Luis Arce, Ignacio Santa Cruz, Armando Gudiño, Carlos Cuelho, César Vuotto, José Carlos Freaza, Aurelio López y César Luis Cáneva, entre tantos otros.
Dos décadas gloriosas
Los primeros campeonatos oficiales de la flamante Liga Posadeña de Fútbol fueron para Unión, ganando los torneos de 1935, 1936 y 1939, para luego repetir en 1941, 1942 y 1944, totalizando seis campeonatos de la “A”.
En la década del ’30 complementaban la veteranía de Víctor “Tito” Echeverría, “Cañada” Venialgo y Alberto Tiozzo, con la juventud de los hermanos Manuel “Carpincho” y Francisco “Carpincho chico” Cabral, Paiva y Aníbal García, además de Francisco Fernández, Galván, Rotela, Dávalos, Evaristo Bogado, Nogueira y Ernesto Esquivel, entre otros.
En la década del ’50 seguía en los primeros lugares porque mantenía esa base y se agregaron otros, tal el caso del arquero Sixto “Tacuara” Ríos y una delantera que llegaron a integrar el seleccionado posadeño, como Carlos Duarte, Miguel Angel Gudiño, Martín “Chila” Silva, Juan López y Juan Valentín Lezcano.
Se agregan Armando Gudiño, “Gallineta” Avalos, Walter Hugo “Sapirain” Méndez, “Kilito” Vergara, Ambrosio Otazú, Alé, “Beco” Maciel, “Rendija” Prieto, Beltrameti, Gravre, “Cuca” Spadano y Alarcón, entre otros.
Ya en la década del ’60 se puede mencionar a Piriz, Fretes, Reyes Ovelar, Quiroz, Von der Hayde, Chamorro, Rubén Ernesto Gudiño, Cabaña, Balmaceda, Barquinero, Mancuello, Galeano, Alberto Ríos, Alberto Insaurralde, Lisardo Garay, Mario Sánchez, Floribal, con el ascenso logrado en 1965 de la mano de Ignacio Santa Cruz, como director técnico.
Después de eso alternó descensos y ascensos, de acuerdo al entusiasmo de los cada vez más pocos directivos vinculados al fútbol, a tal punto que pese a su glorioso y rico historial terminó desafiliándose de la Liga Posadeña en 1994.
Altibajos “cebras”
El primer descenso del club Unión se concretó en 1950, pero al año siguiente volvió a ascender. Se vivió momentos dramáticos en 1953 cuando debió definir con Huracán. Se disputaron tres partidos para determinar el descenso y en el primer partido los del “Globo” ganaron 5 a 0. En el segundo partido los “Cebras” triunfaron 3 a 1 y en el decisivo volvieron a ganar por 2 a 1.
Otro momento crítico ocurrió en 1954, cuando se salvó en la cancha de Guaraní, en aquel recordado 2 de mayo de 1954, cuando Unión empató con Atlético Posadas en los minutos finales del partido con el gol de cabeza del arquero “Tacuara” Ríos. El arquero fue llevado en andas hasta la sede del club, que así se convirtió en el héroe de una de las hazañas más memorables del fútbol posadeño.
Al año siguiente, en 1955, en cancha de Brown, los “Cebras” perdieron la categoría frente a Guaraní tras caer por 3 a 1. El ascenso recién se logró en 1965 bajo la conducción de Ignacio Santa Cruz, y tras militar varios años en el círculo superior, el descenso volvió a condenar a Unión. En 1979 volvió a ascender en otro hito memorable en su historial. Adquiere ese derecho luego de derrotar a La Picada 3 a 0, dirigido por Félix Medina, otro entusiasta colaborador de la institución.
Volvió a descender en 1981 al caer en cancha de Brown frente a Guaraní por 4 a 1 y volvió al círculo superior en 1983, que de ese modo fue la última vuelta olímpica en su historial. Dirigido por Félix Medina. Ese plantel de Unión estuvo integrado por Emilio Alegre, Alberto Maldonado, Sergio Luis Duarte, Ramón Edgardo Horrisberger, Mario Orlando Ortiz; Ramón Darío Talavera, Carlos Enrique Ibarra, Raúl Aníbal Alonso, Juan Liborio Silvero, Ignacio Maldonado y Héctor Omar Enríquez. El preparador físico fue Walter Albino Bogado.
Posteriormente el equipo de Unión volvió a la divisional del ascenso y en 1994 fue su última participación en los campeonatos oficiales de la Liga Posadeña de Fútbol antes de su desafiliación.
Fuente: primeraedicionweb.com.ar
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