Por ser la primera vez en un Argentino A, por los nervios que implica debutar como local y por la jerarquía del rival, hay motivos más que suficientes para que Crucero festeje el 1 a 0 frente a Sportivo Belgrano de San Francisco, Córdoba, por la primera fecha de la zona 2.
Es que la victoria, que llegó a través de un golazo de Alejandro Duré, a los 9’ del primer tiempo, tuvo doble validez por lo que significan los tres puntos, aunque no tanto por el nivel de juego evidenciado.
Los primeros minutos del primer tiempo, el muy buen desempeño de Gabriel Tomasini (ver página 9) y algunos momentos de Brítez, Cabrera y Gamarra fue lo más interesante que mostró el Colectivero para justificar tres puntos que costaron más de lo previsto. Pero que se festejaron mucho.
La tercera, la vencida
Pese a mantener el tradicional 4-4-2, Crucero salió de manera ambiciosa al campo de juego. Con Pey y Polaquito iluminados, Soto y Duré armaron una sociedad importante del medio hacia arriba. Gamarra cortó y distribuyó y el equipo de Dechat tuvo un lapso alentador con tres llegadas muy claras en menos de 10 minutos.
A los 2’, un remate de Soto fue magistralmente desviado por Aseff; a los 8’ fue el Gato Rodríguez que desperdició su chance debajo del arco, pero 60 segundos más tarde, con la tercera llegó la vencida. Soto asistió perfectamente para la entrada de Duré, y el ex atacante de Mandiyú sacó un potente remate de derecha en el borde del área que dejó sin reacción al uno cordobés.
A partir de ahí, y más tranquilo con la ventaja, Crucero mantuvo su predominio en la mitad de cancha, fundamentalmente por el aspecto físico, mientras que la visita no logró usufructuar la liviandad de su juego en ocasiones de peligro.
Sin embargo, y llamativamente, quizás debido al duro trabajo de pretemporada, el fondo del Colectivero fue mostrando algunas grietas que bien pudieron haber costado caro.
Lucas Nardi, tras enganchar dentro del área, estuvo a punto de establecer la paridad, aunque la mas cerca llegó a través de un remate de Goycochea de media distancia que casi se le escapa a Gaona.
De mayor a menor
Pero el rendimiento local, se veía, no era el mismo con el que arrancó el juego. Las piernas comenzaron a pasar factura, el cansancio se apoderó de algunos y esto, sumado a la mayor determinación de los visitantes, inclinó la balanza a favor de la visita.
Con la peligrosidad de Francia y Farías, más el acompañamiento de Biason y Pekarnik, los cordobeses llevaron las acciones al campo de Crucero. Tomasini ganó en protagonismo en el juego aéreo y Gaona ensució mucho más su buzo.
Los ingresos de Medrano, Fleitas y Escobar sirvieron para oxigenar el medio, aunque siguió faltando un dueño de la pelota, ese que la tenga bajo el pie y permita defenderse con la redonda, sin la necesidad de correr a los rivales desde atrás.
Cabrera tuvo una intervención clave al salvar sobre la línea un cabezazo de Francia con destino de gol, e instantes más tarde Gaona se lo sacó a Aguirre de tiro libre.
Esa dinámica de juego tuvieron los últimos 30 minutos, donde, con poco, Sportivo Belgrano hasta hizo méritos para llegar a la paridad.
Pero fiel a sus principios, la solvencia y jerarquía de sus defensores mantuvieron el arco en cero y el gol de Duré fue más que suficiente para comenzar con el pie derecho. Para mejorar habrá tiempo.
Fuente: territoriodigital.com
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